Mass Opinión: 5 años y contando.
Hugo
Triano Gómez.
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Ya son cinco. Cinco años de haber tomado
aquella decisión de observar un acontecimiento importante y tratar de ir más
allá con él. Es verdad que los acontecimientos siguen ocurriendo a una
velocidad vertiginosa haciendo relevante la tarea de seleccionar el asunto al
que se desea abonar algo más.
La satisfacción de cumplir un deber -el deber
periodístico- pasa a segundo término cuando se piensa en la aportación que cada
entrega busca, en aras de lograr hacer opinión pública. Esa que dota de mayores
elementos a una sociedad y que puede ayudarla a tener claridad sobre las cosas,
ubicarlas adecuadamente y tomar mejores decisiones.
En este nuevo periodo que nos permite alcanzar
un lustro de vigencia, Mass Opinión ha seguido de cerca la relación CFE-Tabasco en el pacto que viene y que no acaba de llegar. Vio con asombro y ubicó dentro
del infortunio democrático la decisión del gobernador tabasqueño Arturo Núñez de cancelar su política de dar declaraciones, ingresando a “la fila de los
arcaicos de los que tanto se quiso desmarcar”.
Se usó la lupa para advertir que la misteriosa danza de los millones dada en el Congreso local hace un año -en medio de la
quiebra estatal- coincidió con la salida de Francisco Rullán del OSFE y más aún
con la falta de oficio del entonces presidente de la junta de coordinación
Rafael Balboa. Lo relevante del asunto es que con esa distancia de por medio,
hoy aún se mantienen las dudas sobre el destino del recurso y quizás ningún
criterio serio ha quedado satisfecho con las explicaciones.
Por supuesto hubo líneas y más líneas para
referirse al primer informe de gobierno del jefe del ejecutivo tabasqueño dadas
las expectativas creadas, generadas meses atrás. Los saldos del informe bajo
una perspectiva seria fueron cosa obligada de realizar.
También la mirada de Mass Opinión aterrizó con
la llegada del Presidente Enrique Peña a tierras chocas en medio de una
situación que después derivaría en un conflicto: El del pozo Terra 123 y sin
atender otros que hicieron ver la visita como un asunto de un Presidente “buena
onda” y un gobernador “agradecidísimo” como pocas veces con los visitantes.
Los enroques del gobierno nuñista, la anticipada renuncia de Raúl Ojeda, la política del IEV y el deceso del policíaa quél ligado presuntamente a unos secuestradores también tuvieron su lectura en
este último año, incluso entre líneas.
La amenaza fantasma de PEMEX de irse del
estado ante los bloqueos que comenzaron a sufrir fueron ubicados en la
dimensión de lo ilógico, que al final los hechos le dieron a los amagos del
subdirector de PEP José Luis Fong, que en efecto no fue nadie para decidir que
la petrolera se marchase. La reforma Energética en sus momentos cruciales
también fue objeto de revisión, visto también desde los intereses y
preocupaciones locales.
El año resumido también tuvo sus episodios
escandalosos como aquél que involucró al sistema DIF y su programa de desayunos
escolares, al IEM y la situación de su directora Leticia Romero acusada de
incompatibilidad de funciones y a la contralora Lucina Tamayo raspada con la denuncia de compras con sobreprecios y pago de aviadores, hechas por su cesada
directora de administración.
Ni que decir de la vergüenza ajena sentida
tras el bochornoso episodio que sufrió la flor de la jungla y el pantano en la
noche de su elección y que amén de un “acto de canibalismo, es (fue) reflejo de
la calidad de la educación aprendida” por los tabasqueños.
Con la ignorancia a punto de parir en el caso
del hospital de tamulté de las sabanas se advirtió del riesgo del propio
gobierno de ser el padre de un desastre que afortunadamente no ha sucedido,
pero aún se mantiene. El asunto de los migrantes y la inseguridad
necesariamente fueron atendidos entendiéndolos como problemas complejos que no
admiten medidas ligeras.
El papel de los medios mismos y los comunicadores tampoco quedó exento cuando sucedió lo que sucedió en vísperas del
segundo informe presidencial, donde ahora se sitúa la mirada. Sin dejar de
profundizar en la realidad de la relación política-dinero que sigue siendo
inseparable e indivisible en México.
El reto pues al ajustar cinco años con usted
es mayúsculo y permanente. El compromiso es el mismo: Ejercer el periodismo.
Hacer de la razón un medio eficaz para generar conciencia sobre las cosas que
deben importar.
Con la celebración llega la renovación -de
imagen primeramente- y de bríos después. A quien se esmeró en donar su talento
a la idea de refrescar la insignia institucional, por su entusiasmo genuino,
agradecimiento sincero. A los que nos distinguen con su lectura y
consideración, agradecimiento mayor. Son motor de firmeza y convicción que Mass
Opinión no echará en saco roto. Gracias...de nuevo.
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